Cisco Tschurtschenthaler - Josefina Muse #42

Cisco Tschurtschenthaler - Josefina Muse #42

Nacida y criada en Alemania, pero afincada entre Bali y Australia, Cisco Tschurtschenthaler es una modelo aclamada internacionalmente desde los dieciséis años.

Se convirtió en empresaria cuando ella y su marido George decidieron transformar su casa de ensueño en una isla de Bali en un hotel boutique sostenible, The Slow.

Actualmente en Australia, Cisco y George, amantes del surf, están a punto de abrir Sea Sea, un surf-club-hotel inspirado en los años 70 en Crescent Head que ofrece una experiencia única y completa centrada en el surf, el arte, el diseño, la comida y la música.

Cisco es madre de dos niños pequeños.


Nació en Alemania y comenzó su carrera como modelo internacional. ¿Cómo recuerda su etapa en el mundo de la moda?

Empecé a trabajar de modelo cuando tenía 16 años, todavía iba al colegio y vivía en Múnich con mis tres hermanas y mis padres. Mi madre nunca me permitió faltar a ningún examen en la escuela, pero apoyó mi carrera. Trabajar de modelo era divertido en aquella época, trabajar con fotógrafos increíbles, meterse en diferentes papeles en las sesiones de fotos, casi parecía actuar un poco... todo esto fue antes de que aparecieran IG y las redes sociales. Entonces parecía mucho más auténtico, como crear arte juntos. Cuando miro atrás, fue una experiencia divertida (no siempre) y memorable.

Después te mudaste a Bali y te convertiste en empresaria.

¿Puedes contarnos más sobre tu historia y por qué elegisteis la isla de Bali para este proyecto?


Mi marido George y yo estuvimos viajando un tiempo a Bali y entonces decidimos construir allí nuestra primera casa. Compramos más terreno y quisimos diseñar la casa de nuestros sueños con la ayuda de mi padre, que es arquitecto. El trabajo nos llamó a los dos a vivir en Nueva York durante un tiempo y cuando volvimos a Bali después de 18 meses, Bali se había desarrollado tanto que decidimos convertir nuestra casa de ensueño en una estancia en la isla y ese fue el nacimiento de The Slow.
Desde entonces nos hemos separado de The Slow y hemos vuelto a Byron Bay. La vida aquí es genial para los niños y vamos a abrir nuestro nuevo local (SEA SEA SURFCLUB) a finales de año en Crescent Head.
 

También has fundado tu propia marca de artículos para el hogar, Cisco & the Sun, una tienda en línea de piezas artesanales de Bali y Camboya. ¿Cómo se le ocurrió lanzar una línea de vajillas y cerámicas artesanales?

Cuando estábamos seleccionando la vajilla para nuestro hotel no encontré ninguna pieza que me gustara y decidí crear la mía propia. Cuando abrimos, la demanda de vajilla fue tan grande que decidí venderla y hacer negocio con ella. A mi regreso a Australia decidí vender mi hermoso negocio porque quería más tiempo para centrarme en mi familia y, por supuesto, prepararme para el nuevo club de surf que requiere toda nuestra atención en este momento. Tenemos algunas cosas nuevas y emocionantes en la tubería así que estad atentos.

¿Dónde encuentras tu inspiración?

Supongo que mi creatividad viene a mí cuando me siento relajada y tengo un momento para estar quieta sin el ruido de la realidad de llevar una casa y tener dos niños pequeños.
 
¿Cómo te cuidaste durante el embarazo?

Durante el embarazo, mi mejor consejo sería que escucharas a tu cuerpo y no te estresaras por no hacer suficiente ejercicio y todo eso. Es una etapa muy valiosa y yo disfruté mucho de la pereza y la relajación en mi rutina de ejercicios. Por suerte estuvimos en Bali durante mis dos embarazos y me encantaba recibir masajes semanales, comidas caseras y largas noches de sueño.

¿Cómo definirías tu estilo? ¿Tienes algún consejo de moda para las mujeres durante el embarazo?

Mi consejo para cualquier mujer embarazada sería que se comprara ropa premamá. No hay nada más frustrante que no caber en tu ropa de antes o intentarlo pero resulta incómodo. Yo me compré unos vaqueros premamá muy chulos y me encantaban. Te sientes normal. Hoy en día hay muchas marcas geniales, me encanta lo que está haciendo Nicole con Bumpsuit. Nagnata es una marca australiana estupenda que hace ropa de entrenamiento preciosa y lista para llevar, apta para todas las tallas. Yo vivía con mis shorts y tops Nag, perfectos para la lactancia. Viviendo más de 10 años en Bali, definiría mi estilo como un estilo playero relajado. Me gusta arreglarme cuando voy a cenar o de fiesta. Me encantan los trajes de 3 piezas (matteau) y los minivestidos de crochet (todo lo que queda). Sin embargo, la mayor parte del tiempo voy detrás de dos niños, así que la comodidad es clave.

 
¿Qué modelo de Josefina has elegido y por qué?

Tengo un Josefina grande en negro que era muy práctico cuando mis hijos eran más pequeños y yo les daba el pecho y tenía que llevar muchas cosas encima (el cambiador Matt y los biberones, las toallitas y los juguetes). Ahora he elegido la talla mediana porque mis dos hijos ya no usan pañales y tengo que llevar muchas menos cosas. es muy práctica para llevar el ordenador cuando voy a una reunión. Me encanta la opción de la correa larga. Realmente es una bolsa muy bien diseñada.

¿Qué hay en tu Josefina?

Mi ordenador, mi botella de agua, mi teléfono, un bolígrafo y una lechera, pequeños coches de juguete, toallitas húmedas, bálsamo labial y tentempiés para mis hijos y para mí.
¿Qué es lo que más te gusta de ser madre?

Ser madre es una tarea enorme (jajajaja). Me encanta el amor que recibo de mis hijos, los mimos y las sonrisas. Aunque es lo más difícil que he hecho nunca, también es lo más gratificante. El tiempo vuela, así que intento aprovechar todo este tiempo especial.
¿Cuál crees que es el mayor reto como madre?

Lidiar con las emociones e intentar hacer demasiadas cosas sin perder la cabeza.

¿Quién te inspira como madre?

Mi madre y mis amigas. Tengo tres hermanas y mi madre es un portento. Nunca se quejaba y lo hacía todo. Mis padres eran muy cariñosos y nos daban prioridad. Siempre vivíamos aventuras geniales juntas.
También tengo una gran comunidad de amigas, todas ellas madres, que son geniales. Nos apoyamos mutuamente y también podemos ser vulnerables juntas. Las cosas no siempre van bien y en los momentos bajos es muy agradable tener a alguien con quien guardar el espacio o simplemente tomarse una copa de vino, abrazarse y, con suerte, reírse de ello.

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